En la zona, a la vera del camino, se halla una gran y antigua piedra labrada en forma de cabeza humana. Los vivientes del lugar dicen que no muy lejos de ahí se encontraría también su cuerpo.
Es bueno comprobar cómo la comunidad protege su patrimonio.
Estas iniciativas de protección y valoración vienen siendo fomentadas por el trabajo incansable de don Miguel Rodríguez Sánchez y su hijo Miguel Santiago Rodríguez Roncal, así como por su familia, colegas y amigos.
Y en este viaje también se tuvo la suerte de contar con la compañía del R.P. Alois Eichenlaub, amigo tanto personal como de la Red y reconocido por su extraordinaria labor como fotógrafo y por su quehacer en beneficio de la población cajamarquina.
No hay comentarios:
Publicar un comentario