agosto 30, 2012

Sonrisas y esfuerzos

A fines del mes de julio tuvimos visitas muy importantes en la casa de la Red. Habían llegado siete niños y niñas con sus papás o mamás para participar en el V Encuentro de Juanitos y Padres de Familia del Programa Comunitario.
Este Encuentro ya tiene tradición en Bibliotecas. Cada año se reúnen los Juanitos, sus papás, los coordinadores y demás miembros del Programa Comunitario para pasar dos días con conversas, capacitaciones, manualidades, juegos y paseos.
Este año, debido al Estado de Emergencia que seguimos padeciendo en Cajamarca, no hubo muchas posibilidades de salir con los niños. Pero aún así, la hemos pasado muy bien.
Cada año nos sorprende el aguante de estos niños mal llamados “discapacitados”, su ánimo, sus maneras de participar, sus gestos de cariño y sus sonrisas.
Son estas sonrisas que merecen el esfuerzo –porque venir desde tan lejos, acostumbrarse a un lugar diferente, una cama que no es propia, personas ajenas y comida distinta seguramente requiere del mismo esfuerzo que preparar un encuentro.
Fue bueno encontrarnos otra vez entre estas sonrisas y esfuerzos.

Aprender y crecer

Cuando empezamos nuestro trabajo con los niños con capacidades proyectables en el año 1994, nuestras tareas se enfocaron en el acompañamiento de los Juanitos. Visitarles en su casa, jugar un rato con ellos, conversar sus familiares y hacernos conocidos como programa fueron nuestras principales tareas.
Ahora –18 años después– las exigencias a nuestros coordinadores son mucho más concretas y fuertes.
En la medida en que el Programa tuvo que ajustar su trabajo a los estándares internacionales de proyectos, también crecieron los requerimientos en cuanto a la capacitación de nuestros coordinadores.
Hoy el Programa Comunitario requiere el cumplimiento de diversas y difíciles tareas y actividades a cada coordinador: visitas programadas y unidades de terapia planificadas para cada Juanito, capacitación a los Grupos de Padres de Familia con temáticas especificas como “rehabilitación y terapia”, “discapacidad y sociedad” o “Juanitos y medio ambiente”, actividades de sensibilización comunitaria, acompañamiento con tramites, limpieza de chacras y espacios públicos son algunas de estas tareas.
Por eso, los encuentros de capacitación, el estudio y la auto-capacitación conforman las bases de los quehaceres de nuestros coordinadores. Poder encontrarnos para nuestra formación no es una tarea fastidiosa, sino una gran alegría, porque en familia se aprende mejor, juntos crecemos más rápido y en comunidad estudiar se hace más ligero.
También nuestro último Encuentro de Capacitación en el mes de julio fue una minga para cultivar nuestros saberes, una fiesta para celebrar la sabiduría ancestral.