abril 24, 2014

Defender el libro

José Isabel Ayay Valdez es un Coordinador veterano de nuestra Red, con nueve bibliotecas en la zona de Porcón, provincia de Cajamarca.
Durante la Asamblea nos dijo: “Hay que cuidar al libro como a un hermano; él es la sabiduría de nuestro pueblo”.
La sencillez y profundidad con que habla José Isabel nos cautiva e impulsa.
Su segundo grado de primaria no hace mella en sus amplios conocimientos ni le hace tener miedo de hablar con solvencia ante el público más complejo, y exponer sobre temas que van desde las leyes del país hasta las papas nativas; o desde la defensa del agua hasta la defensa del quechua como un idioma pleno y bello.
Y su admirable y constante empeño por defender al libro como una herramienta de fuerza y esperanza.
Siempre podemos defender los libros como el poeta Mario Benedetti decía para defender la alegría:
defender la alegría como una bandera
defenderla del rayo y la melancolía
de los ingenuos y de los canallas
de la retórica y los paros cardiacos
de las endemias y las academias.

Celebrando y creciendo

La Asamblea General de Bibliotecas Rurales es también una celebración de reencuentros, un recoger ánimo para continuar la marcha con los libros a cuestas.
La tarde del 29 de marzo, durante la Asamblea, con alegría acompañamos a Mara Elina –voluntaria de nuestra Red– en el festejo de sus doce años de edad: ¡Toda la comunidad participó y compartió esas tortas de cumpleaños!
Mara también representa para nosotros una expresión de la voluntad, que crece con firmeza en el compromiso y la libertad de forjarse con el NOSOTROS, para tejer los preciados hilos de una justa y animada vida comunitaria.
¡Felicidades por este crecer juntos, Mara!

Cuidar la savia

Los libros son para nosotros como la savia de este árbol bibliotecario. Pero escasea.
No sólo nos faltan libros porque no tenemos la solvencia económica para adquirirlos, sino porque –a más de ser muy caros– faltan aquellos que tienen mucha demanda en nuestras comunidades: diccionarios, códigos legales, manuales de carpintería, electricidad, etc., literatura peruana y latinoamericana, enciclopedias de historia y geografía… y, sobre todo, más libros propios que reflejen nuestra situación y conocimientos.
El problema es múltiple no solamente porque en la central de la Red somos pocos –¡poquísimos!– voluntarios, sino porque siempre la demanda es alta en el proceso de canje.
Y trabajar los libros en el campo no es lo mismo que tenerlos en una biblioteca modelo de la ciudad: aquí nuestros libros son herramientas y, como tal, se afectan a veces mucho con su uso.
Por eso estamos llamados a cuidarlos, para que puedan seguir su camino como savia alimentando la todas la ramas, las hojas y los frutos de este árbol.
Ahora que estamos haciendo un nuevo inventario bibliográfico, algunos de nuestros libros han regresado de las bibliotecas en condiciones bastante deplorables.
Para nuestra reciente Asamblea, el equipo de voluntarios del Centro de Canje separó los libritos maltratados para mostrarlos y llamarnos la atención sobre la necesidad de cuidar aún más estas preciadas herramientas.
Hemos reflexionado mucho sobre eso: Somos conscientes que el deterioro es inevitable, sobre todo porque son leídos a diario y trajinan por nuestras chacras tanto como los lectores, pero de todas maneras tenemos que asegurarles un periodo de vida lo más prolongado posible a fin de que sirvan también a otros lectores en otras comunidades.
Como con el árbol, tenemos que esforzarnos mucho para florear y compartir los frutos.

abril 21, 2014

Compartiendo

Uno de los aspectos que engrandece nuestra organización es la generosidad de quienes forman este equipo. Así, en esta Asamblea, durante uno de los refrigerios, todos los presentes, grandes y pequeños, hemos saboreado las ricas manzanas contumacinas que nos trajo nuestro compañero Ramiro Yglesias.
Le estamos sinceramente muy reconocidos a todos los compañeros y compañeras que traen alguito desde sus chacras –¡encima del enorme peso de los libros!– por alimentarnos como con estas deliciosas manzanas, pero sobre todo por compartir y alimentarnos con su bondad.
¡Muchas gracias Ramiro, muchas gracias a todos!

Lanzamiento de la película

En esta Asamblea presentamos también la película sobre nuestra Red.
No sólo estuvieron presentes bibliotecarios y coordinadores y muchos de los participantes de esta producción que dirigió nuestro amigo Pier Paolo Giarolo, sino también un grupo importante de amigos y colaboradores de la Red.
Nuestro Coordinador General dio la bienvenida y en el transcurso del evento se señalaron los diversos e importantes premios que la película ha venido ganando durante sus proyecciones en Europa.
Antes de la proyección como tal hicimos nuestro All’pata paguikun, la ofrenda a la tierra, las montañas sagradas y los difuntos, así como tuvimos los testimonios por el 20 aniversario de nuestro Programa Comunitario para el Acompañamiento de niños con capacidades proyectables y por los 43 años de nuestra Red.
El lanzamiento concluyó con una joijona, la manera tradicional de compartir nuestros alimentos desde la tierra.

Hacia una comunidad segura para los niños

Desde el año pasado, los coordinadores del Programa Comunitario se están capacitando para sensibilizar a las familias, profesores, personal de salud y autoridades de sus comunidades en el tema de los Derechos del Niño.
Aprender sobre esta temática, manejar bien los contenidos, saber aplicar las dinámicas y exponer en público no es nada fácil. Pero nuestros coordinadores están poniendo mucho empeño.
Como un primer paso tuvimos la oportunidad de aplicar lo aprendido en un taller que dieron los miembros de nuestro equipo a los coordinadores de Bibliotecas Rurales. Durante la última Asamblea en marzo trabajamos una tarde sobre nuestra propia concepción de derechos y maltratos, denuncias y sensibilidad; nuestro propio punto de vista y el de la justicia oficial.
Agradecemos mucho a los coordinadores de Bibliotecas Rurales por su apertura, sus contribuciones, su comprensión y ternura para este aprendizaje en común.

La Fiesta del Canje

Aunque el Centro de Canje ocupa tres ambientes de nuestra sede (uno donde se hallan ordenados los libros destinados al canje; otro donde se procesan, ingresan, reparan y alistan; y otro donde se almacenan) el espacio para el canje como tal nos quedaba siempre pequeño.
El canje de libros –llevado a cabo sobre todo en las Asambleas– implica recepcionar los libros que los Coordinadores traen del campo, escoger y acopiar los libros que llevarán para canjear e incrementar en sus bibliotecas, hacer las listas del caso y volver a empaquetar las colecciones para transportarlas.
Ya desde la Asamblea pasada ensayamos a realizar el canje en la Sala Mayor y funcionó bastante bien, pero esta vez los voluntarios responsables del Centro –más aquellos que se suman a las múltiples y abundantes tareas específicas–, organizaron lindo esta Fiesta del Canje, con carteles de animación a la lectura (que después los Coordinadores pudieron llevar consigo); indicadores de las secciones temáticas; tableros para anotar las selecciones; espacio para libros infantiles; música de fondo; etc., etc.
Nos felicitamos por esta nueva forma que nos impulsa y enseña.

Donde aprender es diversión

El último fin de semana de marzo nos reunimos con el equipo de coordinadores del Programa Comunitario para el acompañamiento de niños con capacidades proyectables. Fue el inicio de nuestro ciclo de capacitación del 2014 y tenemos por delante temas bastante complicados e intensos. Está, por ejemplo “Hemiplejia y su tratamiento”, “Sensibilización en aulas de inclusión” o nuestra “Política de Protección Infantil”, todos ellos con varias horas y diferentes enfoques, de modo que algunas veces incluso tuvimos que recortar nuestros recreos y refrigerios.
Lo lindo de las capacitaciones del Programa es que, cuando aprendemos juntos, se siente ligero. Siempre es posible interrumpir para una pregunta, siempre intentamos encontrar una respuesta en conjunto, aclaramos dudas entre todos; los coordinadores ayudan a “traducir” lo que estudiamos al lenguaje del campo y siempre hay una broma y mucha risa.
A veces nos acompañan algunos niños, hijos de los coordinadores de todas las edades. Ellos nos inspiran su ternura y nos contagian con su alegría. Nos hacen recordar que la enseñanza debe de ser lúdica y nos ayudan a comprender desde su perspectiva cómo debemos de modificar nuestro trabajo para que podamos llegar a los Juanitos, como llamamos con cariño a los niños con “discapacidad”.
Nos gustaría mucho poder llevar este modelo de aprendizaje a las escuelas de inclusión donde estudian nuestros Juanitos, porque sabemos que se asimilan mucho mejor las lecciones cuando son amenas. Por eso, en nuestras capacitaciones se siente mucho ánimo, porque ahí y entre todos, aprender es divertido.

AsambleaS

Semillero
de fogatas,
vivero
de amaneceres:
libro trejo
libro bueno
libro firme
compañero.

Hervidero
de unires,
sembrío
de descubrires:
libro hierba
libro lluvia
libro mozo
pendenciero.

Alfredo Mires, “Tierra adentro”

Nuestra Red de Bibliotecas Rurales cumplió 43 años de venir andando y bregar leyendo. Y lo celebramos con Asambleas, para revisar siempre nuestros caminos y planificar el tiempo que nos toca.
Antes de la Asamblea General de la Red tuvimos el Primer Encuentro del Proyecto Enciclopedia Campesina –que anda retomando sus andaduras–, y en paralelo la reunión del Programa Comunitario, que ya cumplió a la vez 20 años, y no cesa.

abril 11, 2014

Arguedas: “El infinito aliento”

A mediados del mes de marzo se llevó a cabo en Cajamarca la presentación de la Obra Antropológica completa de José María Arguedas, reunida en siete tomos.
El evento fue organizado por la Comisión Nacional y Regional por el Centenario del Natalicio de Arguedas.
El homenaje y presentación reunió a centenares de personas animadas por la música de los clarines cajamarquinos, intérpretes y músicos locales y nacionales así como la danza de los diablos de Cajabamba y otros.
La presentación como tal de la obra estuvo a cargo de nuestro compañero Alfredo Mires. Aquí el enlace de su conferencia:

¡Centro de Canje renovado!

Durante algunas semanas hemos dedicado buen tiempo a mejorar las condiciones de nuestro almacén de libros y de nuestro Centro de Canje (el que marca los sístoles y los diástoles con los libros en la Red), pues si bien es cierto que la mayoría de ellos se encuentran distribuidos en las comunidades, tenemos una gran cantidad en espera de ser llevados o canjeados por nuestros coordinadores.
La salita no es muy grande pero requiere de muchos esfuerzos para darle el mantenimiento necesario y, como nuestros recursos son pocos, tuvimos que dejar las tareas habituales para dedicar muchas horas a este trabajo. ¡Ahora el Centro de Canje tiene un nuevo rostro!
¡Seguramente nuestros libritos estarán también más a gusto!
Como decía Gabriel García Márquez, "El mundo habrá acabado de joderse el día en que los hombres viajen en primera clase y la literatura en el vagón de carga."
Reconocemos los esfuerzos de todos los voluntarios que han participado en esta tarea.