abril 29, 2019

Sueño

Hace poco menos de tres años tuvimos en nuestra casa comunal un gato que se llamaba “Ñaupa”.
El compañero paraba entre los libros; quizá solo nos hizo creer que leía, pero ese ronroneo en medio de un libro abierto parecía el murmullo de un muchacho leyendo.
En noviembre del 2016 llegó “Palomo”: lo encontramos en la calle, malherido.
Él nunca ha sido lector ni ha mostrado interés por la lectura, sobre todo desde que hallamos –también botadito en la calle y hambriento– a “Plumo”, en el mes de febrero.
Ya vamos a hablar con ellos, a ver si hacen algo más que andar durmiendo.

¡Taramuyke!

Marleny Olivera ha empezado con pasos prestos su quehacer como Coordinadora voluntaria de nuestra Red en la provincia de San Ignacio. Y ha vuelto a las comunidades tras largas horas de un viaje que implica cruzar el río en balsa cautiva.
Para quienes no se embarcan en el compromiso de servir a su tierra y a sus pueblos, al sueño de la mente soberana y la cultura comunitaria, le debe resultar difícil imaginar el regalo que constituye ver el ánimo feliz de los niños leyendo, de los comuneros unidos, creciendo.
El pasado 17 de abril empezó a funcionar la Biblioteca Rural "Taramuyke" en la Institución Educativa del Centro Poblado Potrero Grande, distrito San José de Lourdes, Provincia de San Ignacio.
El profesor Diómedes Camacho Zelada es su bibliotecario: ¡y hay que ver ese grato derroche de entusiasmo!
¡¡Van nuestras felicitaciones y abrazos!!

Jaén leyendo

El ánimo anima: ea es la lección que vienen cultivando en la Institución Educativa “Sagrado Corazón" de Jaén.
Nuestra compañera Elizabeth Olano Díaz, Coordinadora de la Red en Jaén, y todo el formidable equipo de la institución impulsan a la lectura con creatividad, responsabilidad y entusiasmo.
Va nuestro abrazo desde aquí, sumándonos siempre a esa gesta generosa.

Ocaso y amanecer

Hoy vi el atardecer más bonito del mundo, en uno de los pueblos más bellos que conozco en Cajamarca.
No sé qué gusto le hallan algunas personas para andar en alguna gran ciudad yendo de compras, entre grandes bloques de cemento. Quizá jamás entenderían la belleza de una casa de barro o las maravillas que inspiran al alma viendo un atardecer como este.
Esa contemplación podría ser calificada de “aburrida” o “rara”, pero entonces tendríamos que estar orgullosos de serlo.
Al paso que van las cosas, puede ser que en unos cuántos años los tranquilos campos por los que pasé hoy sean invadidos por ridículas moles de concreto, que es como oír reguetón en medio de la novena sinfonía de Beethoven.
No se oirán los mugidos de los rebaños ni el crujir de las hojas saludando al viento; no se verán mariposas volando y tampoco niños jugando. No recordarán su historia ni los cuentos de sus abuelos. Y nadie querrá sentarse a ver el atardecer.
Suena triste la verdad si se dice de manera tan directa, pero si no doliera tampoco haríamos nada por tratar de curarla.
La Red de Bibliotecas Rurales es mi familia, siempre lo fue y siempre lo será, más allá del tiempo y la distancia. Ahí tengo cientos de tíos, tías y primos, humanos hermanos que también luchan para que la verdad, al fin, no duela.
Con ellos, comuneros, uno puede sentarse a ver y agradecer este atardecer.
Mara

Un libro, muchas lecturas

“Todas las sangres”, la monumental obra de José María Arguedas podría ser llamada también todas las voces, todas las almas, todo el mundo andino.
Es un libro que abre diversas formas de lectura: desde el conflicto de intereses y bandos, la exclusión, la injusticia, la violencia, el abuso; pasando por las hermosas descripciones de la exuberante naturaleza andina o, el reconocimiento de las firmes tradiciones campesinas con la permanencia de la lengua quechua en los Andes peruanos; las ideas, los prejuicios y las opiniones de la vida y las costumbres de la gente de la costa, los citadinos, los de la sierra, los ricos, los extranjeros, los políticos, la gente toda.
Son abundantes los párrafos sobre la tierra, los cultivos y el trabajo agrícola, la descripción de los paisajes serranos del Perú, la reseña de diversas flores, árboles y aves andinas, todo ello envuelto en el tono sagrado que emite el mundo chacarero de los Andes: “Sobre el amarillo de las yerbas muertas y lo negruzco de los pequeños árboles resecos, las flores de los k’antus resplandecían en lo alto de la montaña. Es la única flor del invierno; abre sus campañillas que tienen no sólo el color sino el brillo de la sangre, precisamente cuando la superficie de la tierra parece muerta.
Arguedas referencia la antigua tradición de compartir el brindis con la tierra, con la montaña: “Don Adrián invitó un trago de aguardiente a cada cabecilla. Derramó primero unas gotas sobre la tierra y esparció otras al aire, en dirección del Pukasira”; “Cinco comuneros derramaron unas gotas sobre la palma de su mano para no mojar la alfombra, y soplaron las gotas de coñac esparciéndolas en el aire. De este modo hacían participar en el brindis a los dioses montañas”.
Todas las Sangres además de representar al Perú, sus contradicciones y sus luchas, es también una exaltación de la fuerza de sus montañas, es decir, la potencia creadora y revolucionaria que hay en el alma andina: “¡El Perú da miedo, a veces! (…) ¡Estas montañas! Si se ponen en marcha, ¿quién podrá detenerlas? Sus cumbres llegan al cielo”.

Estadísticas y pobrezas

Este pasado 10 de abril 2019, el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) emitió un informe señalando que el nivel de pobreza bajó el 2018 del 21.7% al 20.5% en la población peruana.
Ya sabemos que las estadísticas pueden prestarse a los malabarismos, como aquella afirmación que en la ciudad del Vaticano hay dos Papas por kilómetro cuadrado, considerando que la superficie del Vaticano es de medio kilómetro.
Lo cierto es que en esta apoteósica reducción de la pobreza nacional, también se indica que Cajamarca se encuentra en la peor situación, con un nivel de pobreza de entre 37.4% y 46.3%. Esto es diez veces superior al nivel de pobreza en regiones como Ica y Madre de Dios.
Según el INEI, desde el año 2011 Cajamarca se ubica en el grupo de regiones con el más alto nivel de pobreza. Y desde el año 2017 es el único paladín que ostenta este gráfico indicador: Cajamarca, con su extrema pobreza oficial, es diez veces mayor respecto a las regiones con un menor índice de pobreza extrema (0.3% y 0.7%).
Dicen los medidores del ayuno histórico que, aquí, la línea de gasto mínimo para cubrir las necesidades alimentarias vitales es de menos de 183 Soles al mes por persona.
Pero se sigue hablando de desarrollo, sustentabilidad, inversiones, agricultura de exportación y gerenteces parecidas.

Bendiciones y abrazos

Nos llegaron muchos y gratos saludos por nuestros 48 años.
Nuestra gratitud y afecto. ¡Las bendiciones son recíprocas!
¡¡Abrazos para todos y gracias por las enseñanzas!!
- Muchos saludos para toda la familia y quienes nos rodean. Que Dios siempre nos guíe e ilumine para que sigamos en esta ardua labor y responsabilidad por la cultura de los pueblos. Muchas bendiciones y abrazos.
- Felicitaciones a todos los miembros de esta gran familia por el inmenso apoyo a la comunidad cajamarquina. Un saludo cordial a todos y que sigan los éxitos.
- Felicitaciones por tanto compromiso y entusiasmo. Muchas gracias por contagiar la alegría de dar. Muchos abrazos y bendiciones.
- ¡¡48 años!! Es una fecha tan significativa. Nunca podré agradecer todo lo recibido en Bibliotecas Rurales. Un regalo inmenso en mi vida. Muchos cariños y agradecimientos, muchos cariños y que la celebración se extienda a todos.