agosto 19, 2010

Jadibamba

Tan alta está la comunidad de Jadibamba que las estrellas se ven más grandes.
En esos páramos donde el viento rebenquea y el frío estremece, leemos.
Aquí está Marcial Huamán para animar a los comuneros. Aquí está don Apolinar Huamán Molocho, que ha aprendido a firmar y escribir su nombre y que ahora nos dice: “El libro viene, el libro sostiene”.
Aquí está la generosa escuela de los que no se rinden, de los que aún celebran pese a que sufren el asedio de las empresas mineras, empeñadas en arrasar esa tierra extraordinaria, pródiga de papas únicas, de semillas sin par, de cultivos desafiantes.
Aquí camina Marcial, animado por su esposa y sus hijos, llevando los libros a más de una docena de comunidades vecinas, convenciéndose juntos que leyendo se fertiliza la memoria y la unidad.

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