Una niña campesina cruza el patio de su escuela, toma la mano de la profesora Manuela ─Coordinadora de nuestra Red─ y le dice:
─ Profesora, ya hay que orar por nuestro amigo Alfredo, para que se recupere pronto y esté con nosotros.
Y todos esos angelitos se juntan y rezan y acompañan a Alfredo en la lucha descomunal ─personal, familiar y comunitaria─ que le toca afrontar sin tregua para sobrevivir y seguir andando.
2 comentarios:
Me sumo y desde Colombia oro por la salud y bienestar de Alfledo
Unidos con los niños de Bambamarca y su profesora Manuela que oran por Alfredo. Mucha gente aquí en Colombia, mucha gente en Latinoamérica y en muchas partes del mundo seguimos en sintonía con Alfredo por su pronta recuperación. Todo el cariño y el ánimo para él y toda la familia bibliotecaria. Abrazos
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