julio 05, 2025

El pez

Llegó de madrugada. Había esperado un bus al filo del asfalto, cualquier camión que lo recogiera, rebenqueado por las frías brisas malolientes del mar-desagüe cercano.
Habían sido nueve horas de viaje, parado, apretujado entre los otros pasajeros sin pasaje y sin solvencia. Y luego dos horas más de marcha a pie, adivinando la carretera en medio de la oscurana, asediado por diablos perrunos −de esos que cobran peaje pagadero en alma contante y sonante− y fantasmas pillos, de esos que hacen perder el camino.
Pero llegó sonriendo, sospechando la sorpresa que ocasionaría en los niños su preciosa carga.
Cargaba su maletín de errante, de trabajador distante, de laburo baldío.
Y cargaba un frasco, un frasco sin tapa, lleno de agua y en el agua él: un pececito azul que se mecía a cada paso, como distraído.

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Sigue leyéndolo en el libro de la Red:
El hombre que curaba, de Alfredo Mires Ortiz

Hoy, 24 de junio

La profesora Sara Moreno, responsable de nuestra Biblioteca Rural en Institución Educativa (BRIE) en Jaén nos compartió esta experiencia que refleja los aprendizajes de nuestro compañero Alfredo Mires puestas en práctica.

Hoy 24 de junio, en el calendario Andino y Amazónico, hay una gran celebración por San Juan y el Día del campesino.
Durante el recreo los jóvenes de Ciudadanía y Ciencias Sociales VII de la Escuela de Educación Superior Pedagógica Pública «Víctor Andrés Belaunde» de la provincia de Jaén, junto a los de Ciclo I, realizaron un ritual en el SAE (Sistema Agroecológico Escolar) para agradecer la fertilidad de la tierra y reconocer el valioso trabajo de los campesinos. 
También fue un momento para compartir los frutos de la tierra con la esperanza de un nuevo ciclo de siembra en el SAE.
Es un ritual que nos conectó con el SOL, con el ciclo de la VIDA (espiral) y nuestra Madre Tierra y también se renovó el compromiso con el legado histórico de la Cultura Marañón, con la defensa de nuestros fértiles valles y de los ríos Chinchipe y Marañón y nuestros cultivos de cacao, café, plátano, yuca, maíz, zapallo y frejol.

Muchísimas gracias a todos los organizadores y participantes de tan bello agradecimiento a nuestra Madre tierra.

Los andares de las Bibliotecas Rurales en Instituciones Educativas -BRIE-

Continuamos recibiendo noticias del bonito trabajo que hacen las Bibliotecas Rurales en Institución Educativa –BRIE- sus profesoras y directores emprenden diversas acciones de lectura colectiva, narración de cuentos que extienden y cimientan la tradición oral cajamarquina y la cosmovivencia andina. 
Un reconocimiento especial a las BRIE de:
- Pomabamba, con su Biblioteca Campesina Alternativa –ECA Pomabamba, y el Centro Cultural Quiritimayo de Cajamarca realizan diversas actividades de lectura de los libros de la Red que rememora el campo, el paisaje, los cuentos de los abuelos y la memoria campesina a través de los círculos de lectura.
- Bambamarca –Hualgayoc- realiza los círculos de lectura cada semana, implementa la lectura colectiva, la narración de cuentos y la lectura con los padres de familia. 
- Malcas, de Cajabamba, incentiva la lectura con los niños en el nivel de pre-escolar, vinculan a los padres y madres de familia y los profesores de la institución.

Seguimos creciendo...

Queremos compartir con ustedes que, en el mes de junio, se han creado tres nuevas bibliotecas: dos BRIE en las Instituciones Educativas de San José de Paucamarca – San Marcos y Segundo Briones de Namora – Cajamarca. Y, la tercera en el Centro de Salud de Sócota, en la provincia de Cutervo. Ésta última tiene un carácter especial puesto que es la primera vez que se crea una biblioteca en un Centro de Salud; podrán leer los pacientes mientras van recuperándose o esperando turno; sus familiares para distraer la mente de las preocupaciones y el personal que trabaja allí, en sus momentos libres, para seguir aprendiendo, recobrar energías y relajar los ánimos.
Para crear una biblioteca en el campo no se necesita un local especial o grandes estantes, basta tener un pequeño espacio donde se puedan colocar los libros, en forma ordenada, así, como muchas ganas de leer libros de la Red de Bibliotecas Rurales, cuyo contenido ha sido rescatado por los propios comuneros.